domingo, 28 de octubre de 2007

EL VALOR ES COMO EL AMOR: NECESITA UNA ESPERANZA QUE LO ALIMENTE-Napoleón Bonaparte



-Eres muy valiente y madura-me dijo.

Y de nuevo, logró que algo se me rompiera por dentro. No fue el corazón, no fueron esperanzas. Crujió algo para transformarse en algo: una certeza.
Todo, absolutamente, todo mi mundo se va transformando en eso: certezas. A partir de mil incertidumbres, claro.
Cuando estas son tan grandes, tan trascendentales que consiguen paralizarte unos instantes y hacer un recorrido cognoscitivo acerca de todo lo anterior, dejan de ser meras certezas. Y se convierten en realidades. Aún así las bautizaré como certezas valientes. En su honor. Y en el de Napoleón. El valor es como el amor: necesita una esperanza que lo alimente, dijo el tío. Y los cojones. El amor no necesita una, necesita miles. Y necesita valor, eso es cierto, para enfrentarte al que todos han descrito como sentimiento más puro, loco e intenso. Pero éste, no deja de ser otra certeza, muy compleja, de la que podemos aceptar una parte o todas. Es lco, es intenso, pero no puro. No se engañen por dios.
*A pesar de la imagen, no piensen que yo tiré la toalla, porque aquí sigo: sacando esperanzas de debajo de la cama. Además Frida también lo hizo.

2 comentarios:

airen dijo...

totalmente de acuerdo...quizá si no nos empeñáramos tanto en intentar entender el por qué de su sinrazón, disfrutaríamos más de los instantes compartidos y nos comeríamos menos la olla -que eso bien que se agradece-. de todos modos, yo no me fiaría mucho de alguien como napoleón.

Runas dijo...

Siempre he pensado que el amor es el sentimiento mas paradojico que existe, no se le puede intenetar compreder, porque te volverias loca, solo hay que dejarlo que fluya y disfrutarlo mientras exista. Yo tampoco me fiaria mucho de lo que decía Napoleon . Un beso